Tenemos que remar todos en la misma dirección

Estos días estamos viendo cómo mucha gente sale de fiesta a la calle o a hacer ruido y protestar por el confinamiento en pleno estado de alarma. Pero lo más grave de todo es que algunos políticos incitan a los ciudadanos a manifestarse. De verdad, ¿ya se han olvidado del sufrimiento de tantas familias que han perdido a sus seres queridos?

La desinformación puede ser una de las causas, a pesar de que los avisos están en todos los medios de comunicación. También está la guerra que mantiene la clase política, que en teoría tendría que dar ejemplo pero hace lo contrario. Y así vamos mal, no hay más que ver lo que está pasando en el mundo entero: Wuhan, por ejemplo, vuelve a estar en alerta por nuevos casos de covid-19 y Shulan está otra vez confinada. Mientras, en Madrid siguen desalojando fiestas en casas y botellones en plena calle, y se dispersan concentraciones no autorizadas.

En resumen, la extrema derecha sigue con el plan de acoso y derribo al Gobierno, sin importarle lo más mínimo las consecuencias que esto puede traer para la gente. Para bien o para mal, hay un Gobierno elegido democráticamente, pero un día tras otro los de siempre montan un circo en el Parlamento y a veces hasta se suman algunos de los que apoyaron con sus votos la formación del Ejecutivo.

Yo puedo discrepar, faltaría más, lo que no puedo es decir que este es un Gobierno ilegítimo. Ya habrá tiempo para pedir responsabilidades a quien haga falta porque lo primero es intentar acabar con la pandemia o por lo menos contenerla. Hasta entonces, tenemos que remar todos en la misma dirección.