"Soy adicto a una idea del éxito inalcanzable y eso me produce frustración"

La realidad es que he estudiado una carrera, un posgrado y un máster, y a la vez he trabajado a jornada completa en un restaurante de comida rápida para devolver el préstamo que pedí para poder pagarlo todo.

La realidad es que, después de todo el esfuerzo, trabajo10 horas diarias para poder pagar la hipoteca de un maravilloso ático con terraza, un coche de alta gama y las vacaciones en la Polinesia francesa.

Y eso solo para poder publicarlo en Instagram y demostrarle al mundo que lo he logrado. Soy adicto a una idea del éxito que, al ser inalcanzable, me produce frustración, insatisfacción y estrés.

Quiero parar, mirar, atender, escuchar y contemplar. Quiero sentarme a ver una puesta de sol mientras acaricio a mi perro y bebo una copa de vino barato de supermercado.

Y así lo habré logrado.