Dar el pecho en cabinas en la playa, un puritanismo desfasado

Esta Semana Santa, el Ayuntamiento de Peñíscola (Castellón) anuncia que instalará en sus playas unas cabinas reservadas para que las madres den de mamar a sus hijos. Esta medida también está prevista que se aplique en las playas de Noja (Cantabria), Alcossebre (Castellón) y Vigo (Pontevedra).

Resulta bochornoso que una madre tenga que esconderse para realizar un acto tan natural como amamantar a su hijo, como si fuera algo vergonzoso. Sin embargo, hay chicas en 'topless' tumbadas en la arena, bañándose o paseándose por la playa sin ningún reproche por parte de los ayuntamientos, como deber ser.

Ya está bien de tanto puritanismo trasnochado. Una madre debe tener el derecho, por lo visto no reconocido por esos ayuntamientos, dedar el pecho a su hijo donde lo vea necesario y sin trabas de ningún tipo. Si alguien con una moral retorcida no soporta ver ese acto de maternidad en un lugar público que mire para otro lado.