"Mentir es pecado, señor Feijóo, y usted lo hizo reiteradamente en el debate"

En mi época, en el seno de la iglesia católica me repetían constantemente que mentir era pecado. Supongo que en los años que llevo fuera de ella ese valor moral no habrá cambiado. Mentir es pecado, señor Feijóo, y usted en el debate que tuvo con el presidente del gobierno mintió reiteradamente, a sabiendas de que lo hacía.

Supongo que esa táctica inmoral y falta de ética dirigida por el 'Maquiavelo MAR' le llegó a desquiciar y mostró un perfil impropio de él. En apenas 100 minutos Feijóo batió un récord mundial, superando al mismísimo Donald Trump.

Lo que sí es rigurosamente cierto es que el señor Feijóo gobierna ahora en diferentes autonomías, pueblos y ciudades con la extrema derecha formando parte de sus gobiernos y llevándolos con sus votos a las máximas instancias de nuestras instituciones. Eso sí es verdad.

Conclusión, al señor Feijóo la violencia machista le importa muy poco, especialmente a la hora de pactar con Vox y por supuesto, Abascal será su vicepresidente si como todas las encuestas vaticinan necesita sus votos para llegar a la Moncloa.

Debemos señalar la diferencia de que se produzcan, especialmente durante la gestión política, cambios de opinión o criterio, cuestión esta totalmente legítima. Por ejemplo, cuando Sánchez aseguró que no pactaría con Podemos y después los metió en el gobierno, o que no acordaría con Bildu y acabó aceptando sus votos para asuntos sociales que han beneficiado a la ciudadanía, especialmente a la más vulnerable.

Otra muy distinta es mentir a sabiendas de que lo hace, como en el debate hizo reiteradamente el señor Feijóo. ¿De verdad los españoles queremos un presidente así? ¿De verdad lo vamos a consentir con nuestros votos?Reflexionemos, aún quedan unos días para la toma de una decisión, probablemente la más trascendental de nuestra democracia, que nos podría llevar a un agujero negro.