"Ni con estudios, ni con trabajo, independizarse es inviable para los jóvenes"

A veces, tener estudios y trabajo no sirve para salir del hogar familiar y conseguir la deseada independencia. Cada vez es mayor la edad media de emancipación, que en los últimos años ha subido a los 29,8 años. La inaccesibilidad del mercado inmobiliario obstaculiza el avance social. Esta situación genera dependencia residencial de las familias. La realidad financiera, junto con la inseguridad laboral, impide a los jóvenes emanciparse. Sí, es verdad que los salarios se han incrementado, pero el precio de la vivienda más.

Y, por lo general, existen políticas crediticias estrictas que impiden la obtención de préstamos hipotecarios. Es necesario tomar medidas, ya sea regular los precios de los alquileres, reformar las políticas bancarias o incrementar la economía y estabilidad de empleo. El riesgo de pobreza nos afecta a todos por igual, da igual la edad.