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"Hay que eliminar del Código Penal el delito de ofensas a los sentimientos religiosos"

La Comissió de Justícia, a l’inici del debat de la reforma del Codi Penal, aquest dijous.

La Comissió de Justícia, a l’inici del debat de la reforma del Codi Penal, aquest dijous. / EFE / J. J. GUILLÉN (EFE)

En España -bajo la denominación de ofensas a los sentimientos religiosos- pervive la tipificación de blasfemia. El actual artículo 525 de la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal establece que: "1: Incurrirán en la pena de multa de ocho a 12 meses los que, para ofender los sentimientos de los miembros de una confesión religiosa hagan públicamente, de palabra, por escrito o mediante cualquier tipo de documento escarnio de sus dogmas, creencias, ritos o ceremonias, o vejen, también públicamente, a quienes los profesan o practican. 2. En las mismas penas incurrirán los que hagan públicamente escarnio, de palabra o por escrito, de quienes no profesan religión o creencia alguna".

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En nuestra democracia existe la libertad de expresión e incluso, prácticamente, no hay condenas por delitos contra los sentimientos religiosos, pero la existencia de este artículo sigue permitiendo que se presenten denuncias ante los tribunales contra quienes satirizan sobre asuntos religiosos, que se ven forzados a asumir la llamada pena de banquillo. Es importante recordar que el Consejo de Europa pidió la despenalización de los delitos de blasfemia y que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, a través de dos sentencias, declaró que las religiones no son ajenas a las críticas, ya que la libertad de expresión incluye el derecho a difundir ideas que ofendan o molesten.

Sin embargo, el Código Penal español sigue manteniendo el delito de blasfemia camuflado en la tipificación de ofensas a los sentimientos religiosos, por tanto este articulo es innecesario y debe ser abolido, pues responde a una concepción confesional de la legislación penal donde los dogmas de las creencias religiosas son extraordinariamente protegidas de la crítica conculcando la libertad de expresión y la libertad de conciencia de las personas.

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