"Soy propietario de un pequeño comercio, y pienso que la banca aplica prácticas abusivas"

Como propietario de un pequeño comercio, estoy obligado a aceptar las monedas de céntimos con las que el cliente me pague. El problema es que cuando quiero ingresar en el banco dichas monedas, me veo obligado a pagar una abusiva cuota de tres euros por bolsa, y a que se me limite la cantidad a la mitad de la capacidad de dichas bolsas, cuyo proveedor (el mismo banco) me obliga a utilizar.

Un ejemplo: si ingreso 10 euros en monedas de un céntimo, o sea, 1.000 monedas, el banco se queda un 30%, y aunque parezca un atraco, es lo que hay.

Hace años que en Sant Miquel de Balenyá, donde vivimos 1.000 habitantes, cerraron la única oficina que había del BBVA. Me obligaron a desplazarme al vecino pueblo de Tona, pero la oficina a la que me derivaron, no toca dinero en efectivo, por lo que tengo que ir a otra sucursal del mismo pueblo, donde se quejan de que vaya porque ellos no son "mi oficina".

Por otro lado, cuando pones una reclamación, recibes un e-mail automático no contestable, donde solo ponen excusas absurdas al problema real. Es un banco, y es su trabajo aceptar mi dinero sea el formato que sea. También usaron como excusa que el único que no cobraba por ingresar moneditas era el Banco de España, que casualmente no tiene oficinas por aquí cerca.

En tiempos duros, señores bancos, se trata de ayudar, no de robar. A pesar de la crisis, los que siempre ganan son ellos.