"Ante las pensiones y las jubilaciones anticipadas, no todos somos iguales"

El diario 'ARA' ha destapado un nuevo escándalo. El Ayuntamiento de Barcelona aplica, en relación con un acuerdo de 2021, un sistema que permite recibir salario sin trabajar, hasta un máximo de 24 meses antes de la fecha de jubilación. Se denomina “cese progresivo”. Un eufemismo para ocultar la prejubilación pagada con fondos públicos. Ha sido validado por UGT, CCOO y la mayoría de los partidos políticos. Por los mismos que ese año 2021 acordaron penalizar y desincentivar las jubilaciones anticipadas a autónomos y al RGSS.

Eso es corporativismo. Agravado por el hecho de que el desempleo entre empleados públicos es inexistente, mientras que en RGSS el desempleo en mayores de 50 años es el más elevado de la comunidad.

Se une a los escándalos del Parlament de Catalunya (podían cobrar el sueldo sin trabajar hasta cinco años antes de la fecha de jubilación), al de los premios a la jubilación anticipada en los parlamentos de Asturias, La Rioja, Baleares, así como la aplicación de “derechos adquiridos” a diputados y senadores anteriores a 2011 para los cuales 11 años eran suficientes para recibir complemento a pensión máxima. ¿Qué más casos habrá?

Todos estos ejemplos se unen a la discriminación que sufre la jubilación anticipada en RGSS y autónomos, con carreras de cotización de más de 40 años, que ven su pensión reducida, frente a las Clases Pasivas del Estado y a los regímenes especiales. Esta injusticia está denunciada desde ASJUBI40 ante las autoridades Europeas.

Está claro que sindicatos y partidos políticos no tratan a todos los colectivos de la misma manera. Parece que 'todos somos iguales' pero unos más que otros. Desprecian a los débiles y protegen a los fuertes.

Estos ejemplos ponen de manifiesto la necesidad de asistir a la manifestación sobre pensiones del día 28 en Madrid. Espero que los partidos políticos y sindicatos que nos han traicionado tengan al menos la dignidad de no participar.