"Sí a la movilidad sostenible en Barcelona, pero sin olvidar a las personas mayores"

El mensaje de Barcelona es: supermanzanas, pacificación del tránsito, Bicing, patinetes... Puede ser idílico, pero también una pesadilla par muchos mayores, así como para personas con problemas de movilidad.

¿Para cuándo la generalización de minibuses a demanda o que conecten los centros de asistencia primaria con sus centros de urgencia o CUAP y con los hospitales de referencia?

Dicen que se ha de usar menos el transporte privado, pero la única alternativa que hay ahora es el uso de taxi en la mayoría de los casos, con lo cual se perpetúa el problema de la congestión y todo por no existir un transporte público asequible de calidad.

Las bicicletas y patinetes que van por aceras o en contradirección suponen más sustos; y no es cuestión de multas, que también, sino de que estén obligadas a estar matriculadas y tener seguro de accidentes, de manera que estarían registrados en todos los casos y podrían responder ante cualquier percance.

Otra cuestión también es la ausencia de ascensores en accesos de metro a Renfe como en Sants y otras paradas de metro importantes a la calle, así como resulta vergonzoso que no se reparen ascensores existentes ni escaleras mecánicas durante meses e incluso años en zonas de Barcelona de difícil acceso y con envejecimiento poblacional. Eso sí, se inaugurararán jardines, pinturas sobre suelo, zonas peatonales sin alternativa para el aparcamiento como si los coches simplemente desaparecieran por mandato municipal, sin alternativa. Porque volviendo al principio de la carta, muchos de esos coches son de gente mayor que lo necesita para su desplazamiento ante la falta de alternativas mejores.

Hacen falta menos discursos eufemísticos electorales y más realismo de calle, y eso vale para todos los candidatos.