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"Propósitos para un nuevo curso"

Las docentes de la escuela Miralletes en Barcelona, este lunes.

Las docentes de la escuela Miralletes en Barcelona, este lunes. / Jordi Otix

Màrius Folch López

El inicio de un nuevo curso siempre trae consigo la ilusión de una página en blanco. No es solo el momento de estrenar cuadernos, sino también de marcarse propósitos que nos ayuden a crecer como comunidad educativa. Y aquí surge una idea clave: los propósitos no deben ser solo cosa de los estudiantes; también los docentes necesitamos reflexionar y comprometernos con metas claras. Los alumnos suelen empezar con objetivos clásicos: mejorar sus calificaciones, ser más constantes en el estudio, organizarse mejor o participar más activamente en clase, etc. Son metas válidas, pero corren el riesgo de quedarse en lo superficial si no van acompañadas de un compromiso más profundo: aprender a disfrutar del proceso, a descubrir el valor del conocimiento y a entender que cada reto académico es un entrenamiento para la vida.

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Pero, ¿qué pasa con los docentes? También debemos marcarnos propósitos. No basta con repetir esquemas o apoyarnos en la experiencia acumulada. Un nuevo curso exige revisar nuestra práctica, innovar en metodologías, reforzar la empatía y recordar que detrás de cada pupitre hay una persona con sueños, miedos y talentos únicos. Nuestro propósito debería ser inspirar, acompañar y escuchar, sin perder la exigencia ni el compromiso con la excelencia. El verdadero sentido de los propósitos escolares no está en una lista a principios de septiembre, sino en la voluntad de mantenerlos vivos. Cuando alumnos y docentes compartimos metas y trabajamos de forma conjunta, el aula se convierte en un espacio de crecimiento mutuo. Ellos aprenden de nosotros, pero también nosotros aprendemos de ellos: de su creatividad, de su capacidad de adaptación y de su mirada fresca sobre el mundo. Que los propósitos no se nos queden en palabras bonitas, sino que se traduzcan en hábitos, actitudes y acciones que hagan de la escuela un lugar donde todos podamos crecer.

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