La carta de una lectora: "La normalización del alcohol"

Estuve un año sufriendo presión social por una restricción médica que me impedía consumir alcohol. Ese mismo año, un familiar cercano murió de cirrosis. Hoy en día, me posiciono en contra de la normalización del alcohol.

Bebemos cuando estamos tristes. Bebemos cuando hay algo que celebrar. Bebemos cuando hemos tenido un mal día. Bebemos con cualquier excusa y, si no hay excusa, nos la inventamos. Aquello que siempre oímos de que una cerveza o una copa de vino al día es saludable tiene más parte de falso que de cierto.

Ir a tomar algo, nunca es “tomar algo”; es consumir alcohol. “¿Por qué no bebes?” es la pregunta, y no “¿por qué bebes?”. Si bebes agua estando de fiesta, la gente cree algo más debiste tomar.

Creo que, como sociedad, debemos repensar este modo de desinhibirnos y buscar alternativas más saludables. Que esta droga sea legal no significa que sea inofensiva.