"La imagen de los hombres, sesgada y absurda, en la película 'Barbie' es exagerada"

La primera vez que oí hablar de 'Barbie' fue al visionar un 'tráiler' y la verdad, me dio grima la imagen de Ryan Gosling. Tras su estreno me sorprendieron las buenas críticas y alabanzas que el filme mereció hasta el punto de aceptar la propuesta de una amiga de ir a verla. Tras la visión, me asaltaron toda una serie de dudas.

Primero, a los que la califican de divertida comedia les diría que Billy Wilder se debe estar removiendo en la tumba y que no comparto el calificativo ni por las imágenes y mucho menos por los diálogos. Se trataría más bien de un alegato feminista bajo el inocente aspecto de comedia, que ridiculiza hasta el estereotipo al género masculino y que pretende argumentar que solo es factible un mundo totalmente dirigido por mujeres.

¿Es posible que nadie, en pos de la corrección política, se haya atrevido a decir que la imagen que la película da de los hombres es totalmente absurda y sesgada? ¿Realmente somos un atajo de descerebrados que cosificamos a las mujeres, solo nos gusta ver deportes en la televisión y nos rezuma tanta tetosterona que solo sabemos solucionar nuestras divergencias peleándonos? ¿Esa es la imagen que la directora tiene del género masculino? ¿La solución para un mundo más justo es invertir las tornas del patriarcado en pos de un matriarcado? ¿Qué mensaje nos quiere transmitir el encuentro de Barbie con su creadora y la escena final en que va a visitar a un ginecólogo? ¿Que la gran ilusión de la mujer es la descendencia? ¿Qué papel reserva a los hombres en este propósito?

La película es una diatriva en pos del empoderamiento de la mujer, pero el problema es que en este discurso, después de reírse de los hombres, no se sabe qué papel darles en esta sociedad utópica, da la sensación que simplemente los despejan de la ecuación.