"La vivienda ha dejado de ser un derecho para ser un objeto del que sacar dinero"

El grave problema que tenemos con la vivienda necesita soluciones drásticas. Primero, prohibir que las viviendas sirvan de especulación y no sirvan para turistas, ya tienen los hoteles y pensiones. Segundo, que los poderes públicos (Gobierno, comunidades, ayuntamientos) cumplan y promocionen viviendas protegidas para los ciudadanos.

Yo vivo en un piso en Barcelona que era de protección oficial y en mi barrio había muchas viviendas de este tipo. Era durante la dictadura, pero ahora la codicia desmesurada nos ahoga: no se puede alquilar, los fondos especulativos se aprovechan y la vivienda deja de ser un derecho y pasa ser un objeto para sacar dinero.

La democracia es un bien preciado, pero para defenderla se necesitan leyes que nos protejan.