Judici al procés de Catalunya | Directe en 'streaming'

"El hombre que me agredió terminó detenido. Algunos de mis compañeros fueron lesionados", ha explicado. Según el agente, el doctor le tuvo que recolocar la muñeca porqeu el hombre se la pisó. 

"En varias ocasiones pedimos que se apartaran de la puerta. Se pusieron tensos y se agarraron unos a otros", ha explicado y ha asegurado que al intentar sacarlos le lesionaron. "Me dieron patadas, codazos de todo, me arrastraban hacia una valla", ha explicado. 

Marchena reanuda la sesión. Declara ahora un inspector de policía que estuvo en el dispositivo de Lleida. 

Acaba la sesión del juicio y se retomará a las 16.00 horas.

Declara el tercer agente que también intervino en el CAP Cappont e informa que hubo "cinco o seis heridos, aunque no recuerdo ningún tipo de lesión en concreto".  

El segundo subinspector de la Policía Nacional que intervino en el CAP Cappont ha declarado que vieron a mossos al entrar "pero después ya no los vimos".

Un agente relata que fue herido en un dedo y al acudir al hospital vio a una persona que le sonaba su cara:  "Le pregunté si era un mosso y no me respondió. Me mostró dónde estaba la entrada de Urgencias". 

Se reanuda la sesión del juicio con la declaración de un agente de policía que intervino en la Escuela Oficial de Idiomas de Lleida. 

El siguiente agente participó en el dispositivo de Lleida. "Los mossos que había tenían una actitud pasiva y no cooperaron con nosotros", ha explicado. 

"Me engancharon el brazon con la ventanilla e hicieron un amago de inciar la marcha con el brazo atrapado", ha dicho. "Tuve un derrame en el antebrazo", ha explicado. 

Ha contado el incidente con un vehículo que merodeaba por la zona de seguridad. Como el anterior agente ha contado que no quisieron colaborar, ni abrieron las ventanillas y puiseron los seguros. 

Hasta aquí su declaración, es el turno ahora de otro agente del dispositivo de Girona. 

"Detuvimos a un vehículo. Bloqueó las puertas, no apagó el motor. Nos hablaba en catalán y nos dijo que no eramos su policía", ha explicado. 

Hasta aquí su declaración. Es el turno ahora de otro policía que participó en el dispositivo de Girona. 

El agente resultó lesionado. "En el momento que iba a sacar a una de las personas, pasó de tener una actitud pasiva a activa y me dio una patada en el pecho, me caí y me levantó el compañero. Fuimos a detener a la persona y opuso una gran resistencia", ha explicado. 

Termina su intervención y declara ahora un agente que intervino en Girona. 

"Vi que estaban deteniendo a un individuo que había agredido a un agente", ha explicado. 

"Una vez en la puerta la unidad de intervención se interpuso para evitar que fuéramos agredidos. La salida tuvo que ser muy rápida para evitar que recibiéramos daños", ha indicado.

"Me dieron un golpe en la cara. Nos dirigimos al colegio vestidos de paisano con los chalecos y nos tuvimos que meter en un porche porque la gente estaba muy violentada", ha indicado. 

El siguiente policía nacional participó también en el dispositivo de Girona.

Termina su declaración. Ahora es el turno de otro agente que fue lesionado de una patada en los genitales. "Me caí al suelo del golpe", ha explicado.

Marchena detiene el interrogatorio cuando Bernat Salellas pregunta por la masa. 

"Los bomberos llevaban la voz cantante de la masa. Les organizaban", ha explicado. 

"Recibí varios golpes, pero el más fuerte fue en la pierna. Había empujones, golpes, insultos...", ha comentado. 

"Intentamos retirar la gran masa de gente que había durante 50 minutos. No lo conseguimos hasta que sacamos las defensas", ha indicado. 

Se reanuda la sesión. El agente que declara ahora fue atendido por los daños que recibió durante la actuación policial. 

Hasta aquí su declaración. Marchena ordena un receso de unos 20'. 

"Usamos las defensas para apartar a los manifestantes", ha indicado. 

"No pudimos abrir un pasillo porque la gente tenía una actitud violenta, nos insultaban y nos lanzaban cosas. Me hirieron en la boca", ha explicado.

"Nos lanzaron botellas, cascotes..." ha indicado. 

"Cuando nos vieron llegar en las furgonetas, cerraron la puerta. Había una pareja de mossos en actitud pasiva", ha explicado. 

Hasta aquí su declaración, es el turno ahora de otro agente que participó en el mismo dispositivo.

"No tenía instrucción de coordinarme con otros cuerpos había grandes concentraciones de personas", ha contado. 

"Vaig rebre un cop en un dit, no sé con qué. Me tuvieron que atender", ha dicho. 

"Ordené el uso de las defensas. Curiosamente no las estaban usando a pesar de la violencia que estaban recibiendo los agentes. Estaban confinados", ha explicado. 

El agente ha contado que acudieron al centro en apoyo de otro grupo. "Había mucha gente"; ha indicado y ha asegurado que había mucha tensión. 

Hasta aquí su declaración. Es interrogado ahora otro agente, en este caso aprticipó en el dispositivo de Girona. 

"La salida fue muy tensa. Hasta que llegamos al coche había mucha gente de la que habíamos desalojado. Unas 300 personas que nos insultaban", ha contado. 

"Fui al médico cuando terminó la intervención. Estuve 10 días con medicación, pero no cogí la baja", ha explicado. 

"Hubo momentos muy tensos. Intentamos sacar a la gente, pero había mucha resistencia", ha indicado. 

"Se dispararon salvas para que pudiéramos salir", ha explicado. 

"Nos amenazaban y nos insultaban. Nos decían que no íbamos a salir de Catalunya", ha dicho. 

"Nos arrojaron una lata de refresco y una naranja", ha indicado. 

"Había unas 300 personas que nos impedían el paso", ha explicado. "Me pegaron un empujón", ha asegurado. 

"No vi en ningún momento que usaran las defensas reglamentarias. Nos dedicamos a levantar a la gente con las manos", ha dicho. 

"Una vez retirada la gente del acceso, en el hall había unos 20 jovenes radicales con las caras tapadas y el jefe decidió no romper la puerta para que no fuera más grave", ha explicado. 

El siguiente agente participó también en el dispositivo de Tarragona. "Fuera del instituto había gente. Al entrar empezamos a recibir insultos y amenazas de unas 200 eprsonas. También nos lanzaron objetos", ha explicado. 

"Abrimos paso y sacamos a la gente que estaba en el suelo", ha explicado justo antes de terminar su testimonio. 

"Cuando llegamos había mucha gente, tanto dentro como fuera del instituto. Nos insultaban y nos insultaban", ha explicado. "Nos pegaban patadas", ha indicado. 

El siguiente agente estuvo interviniendo el el dispositivo del 1-O de Tarragona. 

El agente ha dado un testimonio parecido al de los compañeros previos, pero su función era básicamente mantener la puerta abierta.

"Iba de paisano, mi funcion era asegurar la entrada de los colegios", ha explicado. 

Marchena reanuda la sesión. Declara ahora un policía nacional. 

 La Fiscalía ha presentado un informe ante el Tribunal Supremo en el que se opone a las peticiones electorales planteadas por Jordi Sànchez, Jordi Turull y Josep Rull para acudir a los actos de campaña de su candidatura o subsidiariamente atender durante el periodo electoral a los medios de comunicación concediendo entrevistas, grabar anuncios electorales o conceder ruedas de prensa en los recesos del juicio oral que se sigue contra ellos en el Tribunal Supremo.

"Me golpearon con una urna en la cabeza".

Declara un agente de la Policía Nacional.

Receso de 20 minutos.

"En la escuela Dolors Monserdà se retiró a la gente por los hombros".

"En el exterior había un vehículo camuflado de los mossos que se llevó las urnas".

"En la Escola de Disseny, me mezclé con la masa y vi como una persona hacía el recuento con muchos votos del sí".

Comienza a declarar otro policía nacional.

"Los mossos que vi eran de seguridad ciudadana, no de orden público. Mis compañeros no se dirigieron a ellos".

"En el patio de la Escola Projecte había mucha gente mayor y se los retiró con mucho cuidado. Hablábamos con la gente y poco a poco se fueron".

"No recuerdo que recibiéramos amenazas de muerte".

"En ningún momento los mossos nos prestaron ayuda".

"La gente comenzó a golpear los vehículos. Muchos insultos".

"En la Escola Projecte había una persona con Síndrome de Down. Se la retiró con cuidado".

"Se utilizó un mazo o un ariete para entrar en el centro. A la salida, la gente insultaba. Pudimos salir de aquella manera". 

Este agente participó en el desalojo de una escuela de Sant Gervasi.

Comienza la declaración de un nuevo agente de la policía nacional.

Acaba la declaración del segundo testigo.

"No vi a nadie encapuchado".

"Me diagnosticaron un fuerte golpe y una fisura intercostal. No estuve de baja".

"A la salida nos cayeron botellas de agua, mecheros, piedras, escupitajos..."

"En un colegio de Tarragona se avalanzaron sobre nosotros, varios recibieron golpes en los testículos".

"Los mosso no colaboraron en nada. Se apartaron cuando entramos y no hicieron nada".

El testigo ha declarado que no vio cómo se desalojó la escalera de la escuela Pau Claris, una de los episodios icónicos del 1-O.

Acaba la declaración del primer testigo.

"Recibí varias patadas. La gente se resistía a ser levantada. Pateaban con las piernas. Y ahí es cuando me dieron".

"La gente formaba una melé en el suelo muy difícil de desalojar. Físicamente era muy duro".

"Nos tiraron incluso una moto".

"Nos lanzaron conos, vallas y adoquines. De hecho, había adoquines preparados. Golpearon a los vehículos".

"La resistencia era fuerte. No agresiones pero sí mucha resistencia", declara el agente.

Se retoma el juicio con la declaración de un policía nacional que intervino en el colegio Escoles Pies.

Hasta quí el juicio por hoy. Marchena suspende la sesión hasta mañana a las 10. 

El agente resultó lesionado y fue atendido en el barco por el facultativo que viajaba con ellos. 

El agente ha asegurado que no vio ciudadanos heridos, con ello ha terminado su declaración. Es el turno ahora de otro agente que estuvo presente en el dispositivo de los mismos centros que el anterior policía. 

"Nos lanzaron objetos contra los vehículos", ha asegurado. 

"Fuimos al Ramon Llull en apoyo a un grupo que ya estaba ahí", ha explicado. 

Hasta aquí su declaración. Es el turno de otro agente de policía nacional. 

"Nos lanzaron objetos. Nos dieron en ls cascos y los vehículos. Cuando nos retiramos, tuvimos que dar la vuelta porque  aun equipo le cortaron el paso a la furgoneta y els lanzaorn de todo", ha explicado. "Vallas, sillas, de todo...", ha indicado. 

"Había un muro humano congregado que nos insultaba y nos escupía. Había personas encapuchadas y algunos llevaban cascos de moto", ha contado. 

"Había cientos de personas con actitud de hostigamiento. Insultos, amenazas...", ha explicado. "Nos lanzaron escombros, vallas, adoquines...", ha contado y ha asegurado que resultó lesionado por un adoquín. 

Hasta aquí su declaración. Es el turno ahora de otro agente que intervino en el mismo colegio. 

"La gente no paraba de insultarnos todo el rato. Yo sí que tuve que usar la defensa durante el repliegue", ha explicado. 

Hasta aquí su declaración. Es el turno de otro agente que participó en el Ramon Llull, como los anteriores. 

"Me dieron con un adoquín en el dedo de la mano derecha", ha explicado el agente. 

Hasta aquí su breve declaración. Es el turno ahroa de otro agente del cuerpo. 

"Nos encontramos a unas 200 personas que no nos facilitaban la entrada. Los fuimos retirando uno a uno", ha indicado. 

"No llegamos a usar las defensas, al menos que yo lo viera", ha indicado el agente que fue lesioando con una herida abierta en el brazo y padeció una tendinitis que le tuvo 3 meses de baja. 

"A causa de la gran hostilidad, tras las salvas, se dispararon pelotas de goma", ha explicado. 

"Nos impedían salir. Nos insultaron y nos tiraron todo tipo de material de mobiliario urbano. Se tiraron a la calzada incluso para que no nos fuéramos", ha explciado. 

"Estuve tres semanas con una venda en la pierna izquierda. Me lesioné en la retirada", ha contado. 

"No usamos las defensas, a la gente la retiramos con nuestra fuerza física", ha indicado el agente que ha asegurado qeu la actitud era muy hostil.

El agente fue lesionado en un dedo de la mano cuando sacaba a la gente de la puerta del colegio en el que actuó. 

Hasta aquí su testimonio. Es el turno ahora de otro agente.

"Nos dijeron que había motoristas golpeando los vehículos policiales", ha explicado. 

"Las defensas solo las usó de forma activa la primera línea, nosotros las sacamos pero no las usamos", ha explicado. 

"Tendría que volver ETA y mataros", ha asegurado el agente que les llegaron a decir. 

"No vi antidisturbios golpeando a ciudadanos", ha comentado. 

"Había un vehículo que hacía tareas de contravigilancia y cuando consultamos la matrícula nos dimos cuenta que era de Presidencia de la Generalitat", ha comentado.

"Había mossos d'esquadra y no hicieron nada para ayudarnos. Hablaban con las personas concentradas", ha comentado. 

"Llegamos al centro acompañados por las unidades de intervención policial. Nos recibieron con empujones y todo tipo de insultos", ha explciado. 

Hasta aquí su declaración. Es el turno ahora de otro policía nacional que actuó en Sant Martí, en Barcelona.

Marchena corta la declaración del testigo y le pide que se centre. "Con la primera frase ya había respondido", le ha dicho pidiéndole que no se alargue en las respuestas. 

"Los mossos que había en el colegio se escondieron en unos arbustos cuando llegamos", ha explicado. 

"Tenía el menisco roto. Me lesionaron y me lo detectaron más tarde con una resonancia magnética", ha explicado el agente que ha asegurado que mientras estuvo en Barcelona estuvo tomando antiinflamatorios. 

"Recibí patadas y golpes en la actuación. Sufrí lesiones como la rodilla hinchada", ha explicado. 

"En el primer colegio no usamos las defensas y en el segundo estábamos de reserva", ha cometnado tras indicar que igualmente actuaron utilizando las manos para sacar a la gente. 

Hasta aquí la declaración del oficial de la Policía Nacional. Es el turno ahora de otro agente del cuerpo. 

"Grabé la intervención entera, pero había que tener cuidado porque se apagaba", ha explicado. 

"En el segundo colegio no usamos las defensas, pero en el tercero sí. Había más de 500 personas y la actitud era hostil", ha comentado. "No usamos las defensas para sacar a la gente del suelo. En todo caso, las usamos para situaciones de enfrentamientos", ha explicado. 

"Hubo una carpa que se desplomó. Debajo había muchos concentrados y agentes. Algunas de las lesiones podrían ser debidas a eso", ha contado. 

"Tengo una cicatriz de la lesión de aquel día, pero lo que más me duele es el odio que veíamos en las personas", ha explicado el agente que cree que fue lesionado con un paraguas. 

Marchena reanuda la sesión con la declaración de varios agentes de Policia Nacional. 

El Tribunal Constitucional ha dictado tres autos. Los dos primeros archivan por pérdida de objeto el incidente de suspensión del recurso de amparo presentado por Cs y PP contra los acuerdos de la Mesa del Parlament que admitieron la delegación de voto de Puigdemont y Comín. El tercero deniega la suspensión solicitada en el recurso de amparo de Cs contra varios acuerdos de la Mesa del Parlament que consideró como votos disponibles los de diputados procesados y suspendidos, ya que para poder acordar la medida pedida debería decidirse sobre el fondo del asunto.

Receso hasta las 16.00 horas.

El agente contesta al fiscal Javier Zaragoza que él no propinó ningún golpe a nadie en el Institut Balmes. 

El agente de policía asegura que le gritaban "Perro", "Fascista", "Votarem", "Fora les forces d'ocupació". 

Explica también que en el barco donde estaba alojado le miró un médico, que temía que tuviera un hueso roto en la mano derecha. Le llevaron al hospital, relata, donde mediante una radiografía, le confirmaron que no tenía nada roto.

Habla un agente que participó en el operativo del Institut Balmes, donde dice que se encontraron con "un muro humano". Asegura que la gente "se puso nerviosa".

Acaba la declaración del comandante del Guardia Civil y ahora el Tribunal Supremo acoge las declaraciones de agentes de Policía Nacional que participaron en el operativo de seguridad en varios colegios de Barcelona durante el 1-O.

Pregunta ahora el abogado Jordi Pina, defensa de Sànchez, Rull y Turull. El testigo relata que no le consta que el señor Jové mandara el documento Enfocats a los señores Rull y Turull"

Se queja la abogada de que el testigo no recuerda con tanto detalle lo que dicen las diligencias cuando la que pregunta es la defensa, en cambio cuando pregunta la acusación, Ana Bernaola asegura que el comandante lo recuerda con todo lujo de detalle.

El comandante no recuerda por qué se vinculó en los informes a Jordi Sànchez con la huelga del 8 de noviembre (el acusado ya estaba en prisión).

"No me consta que el señor Sànchez participara en la elaboración del documento Enfocats".

"En las diligencias ordenadas por la Fiscalía para investigar las estructuras de Estado del 2016 no recuerdo que apareciera el nombre del señor Sànchez", responde el comandante a la abogada de la defensa Ana Bernaola.

Se retoma la sesión: sigue respondiendo a las defensas el número dos del teniente coronel Daniel Baena.

"Nuestro análisis inicial es económico", asegura el comandante.

Pregunta ahora Andreu Van Den Eynde, abogado de Oriol Junqueras y Raül Romeva, sobre las diligencias de la investigación, en concreto sobre la que marca el inicio de las escuchas telefónicas. El comandante no recuerda por qué se pidieron las escuchas.

El comandante reconoce que ni Forn ni Puigdemont dieron órdenes explícitas a los mossos de cara a permitir el 1-O: "De modo formal no, el conseller Forn se le remiten las pautas de actuación por parte del señor Trapero".

El testigo no puede confirmar "al 100%" de qué departamento dependía la web referendum.cat. Respecto al registro de catalanes en el extranjero, detalla que lo desarrolla el departamento de Exterior. "Para poder votar en el referéndum tenías que estar inscrito en él", asegura.

Según el testigo, los Mossos avisaban a los investigados: "Interceptamos llamadas de los Mossos dirigidas a diversos personajes públicos avisándolos o dándoles instrucciones sobre los registros del 20-S". assegura el segon de Baena i secretaria de la instrucció sobre el procés català.

Sigue el comandante respondiendo al fiscal Fidel Cadena: "Las facturas de Unipost estaban anuladas con el número 2100. Esto, en la Administración, quiere decir que es una deuda que se cobrará a la larga".

La abogada Ana Bernaola, defensa de Sànchez, Rull y Turull, se queja de que el testimonio está haciendo valoraciones como si hubiera estado presente en aquellas reuniones con los Mossos. Marchena le responde que el Tribunal tiene claro que no lo estuvo.

"Trapero envía un correo a Forn donde expresa su disconformidad de que los Mossos dependieran del Ministerio de Interior"

El número dos de Baena explica que tras la aplicación del 155: "Los dipositivos hacíamos intervenciones policiales y judiciales y no teníamos problemas".

"Desde el 19 hasta el 27 de octubre hay un aumento de acciones en la calle hasta la entrada en vigor del 155", prosigue. También dice que "hubo acciones en casernas de la Guardia Civil en diferentes poblaciones catalanas"

"En otro correo a Cuixart se hablaba de cómo llevar a niños y personas mayores a los centros donde se iba a votar"

"En varios correos a Jordi Sànchez se hablaba de cómo asegurar los colegios y otro de cómo hacer una especie de acampada o de resistencia pacífica alrededor del Parlament".

"Durante la joranda de Escoles Obertes, ya estaban definidos los centros de votación. La presentación se hizo en la sede de Òmnium Cultural"

"Òmnium participó seguro, y la ANC no lo recuerdo, en el llamamiento a ocupar los centros donde se votaría el 1-O"

¿Qué eran los talleres de resistencia? El comandante explica que eran "reuniones donde se daban consejos de cómo evitar cualquier resolución policial o judicial. Por ejemplo, uno de ellos eran En Peu de Pau"

"En la agenda Moleskine constaba que la ANC y Òmnium tenían como principal función la de la movilización ciudadana".

"Enfocats hablaba de una doble legislación, de una posible desobediencia civil, del referendum y, finalmente, de la declaración de la República".

"Investigamos las estructuras de Estado que aparecían en Enfocats y en la agenda Moleskine. Enfocats es un documento estratégico", ha dicho el número dos de Baena.

"Hubo un momento puntual en el que sacamos a la gente que hacía un tapón en la entrada. Les sacábamos y les desplazábamos. En un momento, vi a dos jóvenes que trataron de romper el cordón y en ese momento sí que un compañero les golpeó con la defensa en las piernas", ha dicho. 

"La situación cada vez era más violenta y más hostil", ha asegurado. "Hasta que llegó la ambulancia estuvimos esperando ahí", ha epxlicado. "La pareja de Mossos no nos ayudó en nada, ni como mediadores ni dando cumplimiento al acto. Solo se personaron cuando apareció la ambulancia", ha comentado. 

"Algunos policías resultaron lesionados. Con parte de lesiones hubo 3 funcionarios", ha explicado. 

"Hubo que lanzar incluso salvas", ha contado el agente que ha asegurado que la salida fue incluso más complicada que la entrada. 

"Las lesiones recibidas eran fruto del esfuerzo de sacar a la gente. Sobre todo arañazos, pequeñas contusiones... A mí por ejemlo me rompieron la camisa", ha contado. 

"Después de una odisea, conseguimos entrar por un camino alternativo. La gente que había dentro se echó al suelo y se entrelazaron", ha dicho. 

"Tuvimos que detener a una persona por agredir a un policía y a partir de ahí, la tensión fue en aumento", ha explicado. 

La agente ha explicado que vio 4 mossos d'Esquadra en la otra acera del primero de los locales y dos en el segundo local. "Estaban ajenos a los problemas", ha comentado acerca de la segunda intervención. 

"Llegamos a contabilizar unos 10 niños en brazos de sus madres", ha dicho. 

Finaliza la declaración del cuarto policía nacional.

"Uno de los compañeros de las unidades de intervención policial recuperó mi equipo de transmisión". "En el vehículo donde me pude meter le tiraron una maceta".

"Había unas 200 personas concentradas y los compañeros nos fueron abriendo paso. Cuando llegamos a la puerta hubo empujones, agarrones y un compañero llegó con un golpe en el ojo. Me arrancaron el equipo de transmisión".

Turno para un policía nacional que intervino en tres colegios de Girona.

Finaliza el tercer testigo de la tarde.

El agente dice que había "personas mayores y alguna con discapacidad física colocadas" para dificultar su trabajo. "Me decía [una persona de 80-90 años]: no me pegue, no me pegue'. Y solo le estaba acompañando", relata.

El agente explica: "Pude comprobar como uno de los organizadores del colegio Provençals se dirigó a la masa con un megáfono diciéndoles lo siguiente: 'Los Mossos nos acaban de informar de que por la zona hay vehículos con policías de paisano'".

El agente explica una escena que vio por la noche el 1-O: "Dos mossos se abrazaron, besaron... con las personas concentradas".

Este agente actuó en el distrito de Sant Martí (Barcelona). 

El policía dice que, en su caso, "no vi que [los votantes del 1-O] lanzaran objetos ni barricadas formadas con objetos".

"En ningún momento los Mossos se pusieron en contacto con nosostros", explica el instructor de la Policía.

"No pedimos ayuda a los Mossos y ellos tampoco nos la dieron, estuvieron estáticos y pasivos", asegura el instructor.

El agente se desplazó de Madrid a Barcelona el 17 de septiembre. Fue el responsable de las actas del distrito 4 de Barcelona (Les Corts) y de Sabadell. Explica que su funciíon era entrar en las escuelas y confiscar el material para el referéndum.

Marchena llama al primer testigo: es el agente de la Policía que redactó el acta del 1-O en Barcelona y Sabadell, inspector 88.009.

Sobre la participación de los dirigentes independentistas presos en la campaña electoral versa 'Prisión y elecciones', el artículo de este miércoles de Jordi Nieva-Fenoll en el que el catedrático de Derecho Procesal expone que "no son peligrosos criminales, sino políticos en activo. No se les puede tratar como asesinos".

Buenos días. Retomamos el hilo informativo sobre el juicio del 'procés'. La sesión de este miércoles empezará con las declaraciones de más agentes de la Policía Nacional. En la jornada del martes, los agentes de Policía y Guardia Civil calificaron de "medida" su actuación el 1-O y apuntaron a los Mossos, de quienes dijeron que quisieron "facilitar" la votación.

Termina aquí el interrogatorio. Marchena suspende la sesión hasta mañana a las 10. 

En la escuela Proa de Gavà sucedió algo similar. "Las entregas fueron voluntarias", ha zanjado y termina así la interrogación de la Fiscalía. 

Termina la breve declaración. Es el turno ahora del último agente pautado para hoy. 

Tras el breve interrogatorio realizado por la Fiscalía, interviene ahora la defensa. 

"Durante toda la mañana se iba informando de los mossos y de la situación del colegio. Los mossos tenían una actitud pasiva", ha comentado.  En la escuela Joan Pelegrí también había muchas personas y ahí también había una pareja de mossos en "actitud pasiva", ha comentado. 

Hasta aquí su testimonio. Marchena ordena un receso de 20 minutos.

"Nuestro instructor general nos envió a la sede de la ANC y nos dijo que requisaramos el material relacionado con el referéndum", ha comentado para justificar que se incautaran varios ordenadores portátiles.

"Uno de mis agentes oyó a un mosso hablando con la gente y avisándoles de que la policía iba a actuar", ha dicho. 

Hasta aquí la declaración del responsable de los equipos de Ciutat Vella. Ahora es el turno de otra inspectora del cuerpo. 

"Para que primara la seguridad tenían que ser intervenciones rápidas", ha comentado el policía que les indicaron sus superiores. 

Sobre los incidentes con los conos y als vallas, Andreu Van den Eynde, abogado defensor de Junqueras, ha tratado de sonsacarle al testigo si las personas congregadas reprendían a los que lanzaban objetos, pero el policía ha asegurado que no vió nada. 

"Nos lanzaron algún objeto. Un cono de obra, una valla...", ha contado. 

"En la tercera intervención, en la Escola Pia, nos bloqueaban el acceso también", ha comentado. 

"Cuando entramos en la sala donde estaban las mesas, nadie se identificaba como responsable. Una pareja intentó esconder la urna", ha explicado. 

El agente ha contado que en la Escuela Mediterrània y en el centro Pau Claris había un mosso que trataba de entorpecer la labor de las unidades de la Policía Nacional.

"Nos insultaron y nos dijeron que nos fuéramos a nuestro país", ha comentado. 

"Cuando llegamos al colegio Meditarrània, la gente se aglutinó en la puerta de acceso y tuvimos que echarlos para poder acceder", ha comentado. 

"Usted hizo mediación en el colegio Dolors Monserdà", le dice el agente al abogado Van den Eynde.

Noticia de última hora:

El TSJC reabre la causa contra Buch por presunta desobediencia por si cedió locales el 1-O. El alto tribunal admite el recurso presentado por la fiscalía y acuerda que se investigue la posible cesión de locales para la consulta

El policía dice que "el 29-S no sabía cuál sería la actuación de los Mossos". "Lo supe a las 6.30 del día 1-O", añade.

"Vehículos de los Mossos taponaron incluso calles de entrada a los colegios", explica.

"Lo terrible fue que algunas actuaciones solo las podría haber podido diseñar el sispositivo de Mossos", expone el Policía. "El disposito estaba diseñado para que el referéndum se llevara a cabo", denuncia.

"Los binomios de mossos tenían actitud contemplativa"

"El uso de la fuerza fue necesaria", considera el responsable de información en Barcelona el 1-O.

El 'president' Quim Torra ha tachado este martes de "aberración democrática y preocupante en la Europa del siglo XXI" el procesamiento de 30 cargos más por el 1-O, que revela a su entender una "escalada en la persecución política" contra el independentismo y un "estado de excepción judicial".

"En muchos centrso se renunció a entrar por motivos de seguridad", ha afirmado el policía.

"Quien decidía a que centro se entraba era yo", dice el agente. 

El policía es el autor del acta policial del 1-O en Barcelona. 

Noticia de última hora:

La Fiscalía del Tribunal Supremo ha informado en contra de la última petición de libertad presentada por los acusados que se encuentran presos y concurren a las elecciones generales del 28 de abril por JxC y ERC.

El fiscal recuerda que esta medida ha sido reiteradamente examinada a lo largo de la instrucción de la causa y también por la Sala y el juicio oral está consolidando las pruebas de la participación de los procesados en los delitos objeto de acusación por el Ministerio Fiscal. El Fiscal considera que por la gravedad de los delitos que se les imputa y la importancia de las penas solicitadas, se mantiene el riesgo de fuga y el de reiteración delictiva, por lo que considera que el mantenimiento de la prisión preventiva es razonable y proporcionado, concurren todos los presupuestos constitucionales y legales para ello y no implica una vulneración del derecho fundamental a un juicio justo.

El agente explica que sufrió una "rozadura" en un tumulto. 

"Había un grupo de personas que querían impedir nuestra entrada. No querían dialogar. No sinstultaban", describe. 

Este agente de la guardia civil resultó herido en el operativo del ayuntamiento d'Esponellà (Pla de l'estany).

"Me dieron directrices el día antes: que la actuación fuera rápida y segura", dice el teniente.

Empujones y patadas, dice el teniente que daban los concentrados. 

El agente estuvo en el operativo de Garrigàs, Alt Empordà. "Al llegar, nos dijeron 'hijos de puta, 'gilipollas',...". Explica que tuvo "un hematoma" por un codazo. 

Relevo en el testigo. Entra un nuevo agente de la Guardia Civil. Cabe recordar que el tribunal ha resuelto no mostrar las imégenes de los agentes.

"En el interior del Ayuntamiento (de Garrigàs) había mossos, que no hicieron nada", relata.

"Salí corriendo porque temía por mi integridad física", expone el guardia civil. "El sentimiento de miedo lo tenía bastante presente", añade. 

El cabo de la Guardia Civil intervino en Garrogàs, Alt Empordà. 

Cambio de testigo, turno para un cabo de la Guardia Civil. 

Noticia de última hora:

El tribunal del 'procés ' ha declarado que "no tiene competencia para decidir sobre debates electorales en el interior de prisiones", y le devuelve la pelota a la Junta Electoral Central, que había sido quien remitió al Supremo la petición de debate realizada por el expresidente de la ANC Jordi Sànchez de celebrar uno en la cárcel de Soto del Real. El tribunal señala que no le compete "velar por los principios que determinan la actividad electoral", ni le incumbe establecer el "régimen penitenciario", informa Ángeles Vázquez.

El agente dice que "una multitud nos persiguieron hasta los vehículos". 

El agente explica que tenía "una contusión importante en la muñeca". El diagnóstico fue "un esguince de muñeca en la mano izquierda" y que estuvo entre "2 y 3 meses de baja".

Describe la actitud de los concentrados como "hostil y provocativa".

El operativo del intituto Antoni Ballester estaba formado por unos 80 agentes. "Había una valla metálica ante la puerta de la escuela que estaba cerrada con llave. La tumbamos con un ariete", explica el guardia civil. 

Relevo en los testigos, entra otro agente de la Guardia Civil. Este intervino en el instituto Antoni Ballester, en Mont-roig del Camp (Baix Camp).

"Nuestra intervención se hizo con el uso mínimo indispensable de la fuerza", dice.

"Nos vimos incapaces de hacer nuestro trabajo y tuvieron que actuar los equipos de reserva, que iban equipados", expone. Y dice que la gente les pegó "patadas y nos escupieron".

Noticia de última hora:

Procesadas 30 personas por organizar el referéndum del 1-O. Están acusados de delitos de malversación, desobediencia, falsedad, revelación de secretos y prevaricación, pero no de sedición.

El agente explica que fue herido en el dedo, una fractura en una falange.

"Algunas de las piedras que nos lanzaron no cabían en una mano", dice.

"Llovían las piedras", relata un agente herido en Sant Carles de la Ràpita. 

Empieza la sesión matinal del juicio. Se reanuda el juicio con los nueve guardias civiles que quedaron pendientes del jueves.

Declara, a preguntas del fiscal, uno de ellos, que tenía el cometido de custodiar los vehículos. Explica que fue herido por el lanzamiento de una moneda.