Una llamada a la acción solidaria mundial

Todos somos conscientes de que se deben eliminar las causas estructurales de las disfunciones de la economía mundial. Estamos en un mundo egoísta pilotado por especuladores individualistas que evitan ordenar la sociedad y resolver dichas causas en bien de sus mercados y su financiación.

"La dignidad de cada persona humana y el bien común son cuestiones que deberían estructurar toda política económica, pero a veces parecen sólo apéndices agregados desde fuera para completar un discurso político sin perspectivas ni programas de verdadero desarrollo integral" (Papa Francisco, Ex. Evangelii Gaudium, 203).

Estados, naciones, políticos, empresarios deberían servir al bien común, esforzándose por multiplicar y volver más accesibles los bienes de este a mundo a todos. Procurar una distribución equitativa, crear programas de trabajo y mecanismos que promuevan la promoción integral de los pobres sin quedarse en el mero asistencialismo. Es una llamada a la acción solidaria en todo el planeta.