"Saldremos de esta, no dejes que el miedo te consuma"

A veces miro el techo y me pongo a pensar. Me gusta imaginar lo que están haciendo las personas en sus casas. Los imagino pintando, leyendo, bailando. Quizá cocinando, gritando, llorando... Pienso en los que están solos, queriendo estar acompañados. Luego pienso en los que estamos acompañados que muchas veces pedimos estar solos. Imagino a los que han perdido a sus padres, hermanos, abuelos en medio de toda esta crisis y no han tenido oportunidad de verlos y despedirse como es debido. Pienso en los que no tienen nada en la nevera y esto se les está haciendo cuesta arriba. En los que ni siquiera tienen un techo, ¿dónde están durmiendo? ¿Qué están comiendo? ¿Cómo se cuidan? ¿Quién los cuida?

Pienso en los médicos, enfermeros, autónomos. En las señoras de la limpieza y en las millones de personas que quedarán en el paro. En el señor que vende la lotería, y el que golpea la pelota en Santa Cruz. Pienso en los estudiantes y los que están a punto de graduarse. En los miles de animales en los albergues que no pueden ser visitados por sus voluntarios. Pienso en mi mamá, en todas las madres del mundo tan valientes y poderosas.

Y te imagino a ti, leyendo esto. Tú, que puedes ser cualquiera de los que mencioné antes, tengo algo que decirte: "Saldremos de esta, mantén la calma. Eres fuerte, dale a tu cuerpo y mente lo que necesiten. Y por favor, no dejes que el miedo te consuma". Te abrazo en la distancia.