Catalunya-España: La tercera vía no es posible

Hace ya algunos años, un director del FMI (Kenneth Rogoff) hizo un comentario que me sorprendió: no solo sabía de la existencia de Catalunya sino que afirmó además que, sin las ataduras del Estado, esta podría ser una de las zonas más prósperas del planeta. Desde entonces varios nóbeles de economía han hecho afirmaciones dando por descontado que nuestra tierra saldría ganando con la emancipación.

Mientras tanto, por estos lares, además del ahogo financiero, los peajes o lo bananero de los trenes de Rodalies, asistimos atónitos a la entronización de Madrid en el eje Mediterráneo y a la zancadilla por parte del Gobierno central al aeropuerto de El Prat.

Dicho esto, entiendo muy bien las razones de sentimiento del unionismo y lo respeto, pero no me cabe en la cabeza que aún se diga que la tercera vía es posible.