Un camino de retos para Pedro Sánchez

Pedro Sánchez resurge apoyado por la militancia para convertirse en el nuevo secretario general del PSOE. Ha ganado las primarias, pero todavía no ha ganado nada. Ahora tiene ante sí esa oportunidad que tanto anhela de demostrar su talla de hombre de Estado y sus miras como político.

Su primer gran reto será arreglar su casa, su partido, y recomponer la unidad interna quebrada desde hace años. Para ello, deberá reprimir su sed de venganza y administrar prudencia. Después, deberá liderar una oposición ilusionante y constructiva que ayude a la gobernabilidad del país.

La situación actual del PSOE la ha creado él mismo al no saber transmitir a las nuevas generaciones los profundos cambios sociales que ha vivido este país desde las primeras elecciones democráticas, equivocándose incluso al pensar que su único adversario político estaba en el PP, cuando quien le ha sacado del terreno de juego es el partido de Pablo Iglesias. 

Al margen de las primarias, el PSOE tiene por delante un camino incierto que puede acabar a la francesa, si no empieza por entender los cambios sociales y darse cuenta de que el problema no son los votos sino los votantes.